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La importancia de las relaciones sexuales en la pareja

Por Abigail Bello Gallardo.



El sexo es la acción de goce que alimenta, nutre y fortalece el alma.

El amor es la más fuerte de las pasiones, porque ataca al mismo tiempo a la cabeza, al corazón y al cuerpo. Voltaire.

Ningún hombre puede enamorarse de una mujer que no le despierte instinto sexual. Axel Martin FrediK Munthe. Escritor sueco.



Es un hecho científicamente comprobado que tener relaciones sexuales beneficia la relación de pareja, no sólo porque durante los juegos sexuales previos al acto se aumenta la secreción de la hormona oxitocina que influye en la formación de sentimientos profundos que unen a la pareja, sino porque beneficia la salud física y mental de quienes las practican.

Entre sus beneficios se encuentran una piel más tersa y cabello brillante en la mujer y mejora su circulación en general al producir más estrógenos y esto le reduce el riesgo de sufrir un infarto. También se cuenta entre sus beneficios para ambos sexos, que fortalece y tonifica los músculos del cuerpo y nos ayuda a controlar o bajar de peso. Otros beneficios de las relaciones sexuales son que funcionan como antidepresivo, tranquilizante, analgésico y antihistamínico natural. Reduce las dermatitis y las imperfecciones de la piel al limpiarse los poros a través de la transpiración. El besar frecuentemente favorece el intercambio de saliva y nos ayuda a ejercitar los músculos de la cara y a evitar la formación de caries y de placa dental. A través del sexo se liberan hormonas llamadas endorfinas que producen una sensación de bienestar y durante el orgasmo se libera una hormona llamada prolactina que actúa como desestresante natural. También a través del orgasmo se libera una hormona llamada serotonina que produce una sensación de felicidad completa.

Hay muchas razones por las que las personas dejan de tener relaciones sexuales. Algunas de ellas son el estrés, la depresión, el cansancio físico, el aburrimiento, las discusiones, el resentimiento, el maltrato físico o psicológico, las enfermedades (como la dificultad para tener un orgasmo en la mujer o la falta de erección en el hombre, la eyaculación precoz, la menopausia o la andropausia, bajos niveles de testosterona, el hipotiroidismo, la diabetes mellitus); el alcoholismo y demás adicciones crónicas; la falta de ejercicio físico moderado. También la utilización de medicamentos puede reducir o eliminar el deseo sexual, por ejemplo los que se utilizan para controlar la presión alta, la depresión, la ansiedad, el colesterol alto, la prostatitis, entre otros.

Es importante encontrar cuáles son los problemas de fondo de la falta de deseo sexual ya sean orgánicos, psicológicos ò emocionales, si es un medicamento que lo está provocando o si es sólo una situación pasajera; consultando a su Médico de confianza y/o a un Psicólogo o Psicoterapeuta calificado.

Pero ¿Qué hacer para provocar el deseo sexual si la falta de deseo sexual es debido al aburrimiento? Ya sea que el aburrimiento esté presente en un integrante de la pareja o en ambos (debido a que tener relaciones sexuales el mismo día, a la misma hora, de la misma manera etc. produce desinterés en realizar el acto sexual), es necesario evitar la rutina y hacer cosas diferentes que a ambos les agraden. Por ejemplo, un lugar distinto, velas aromáticas, un masaje con aceites afrodisíacos, diferentes luces, mirar juntos una película erótica, entre otras muchas opciones.

Aunque todas las mujeres son distintas y requieren de diferentes estímulos para sentirse dispuestas a las relaciones sexuales, se dan las siguientes recomendaciones: Tener juego sexual (esto es, besos y caricias) de diez a veinte minutos, previo a la penetración. Uno de los errores más comunes es pensar que la mujer sólo responde al tacto en la región genital o en los senos; las caricias deben proporcionarse en todo el cuerpo de preferencia en las piernas, los brazos, los glúteos, la nuca, la espalda, el cuello y por último el área genital. Es importante realizar halagos acerca de su cuerpo, de su piel, de sus ojos, etc. evitando de inicio, el lenguaje erótico fuerte que tanto gusta a los hombres. También posee una importancia capital la apariencia del hombre, su limpieza no sólo genital sino también general, de la boca, de los ojos, de los pies, etc. y su aroma; por lo que se recomienda el baño y la aplicación de algún perfume agradable para ella. La ropa interior limpia y apropiada ayuda también a la disposición para este efecto. Insisto, esto varía de mujer a mujer.

En el caso de los hombres, se recomienda para estimularlos sexualmente: Vestirse con ropa interior atractiva o atrevida, incluyendo medias, ligueros, zapatos con tacones altos y delgados. Para la gran mayoría de los hombres es muy atrayente la idea de ver desnudándose lentamente y bailando a su pareja, así que ésta es otra sugerencia práctica para lograr provocar el deseo sexual masculino. Es de vital importancia hacer elogios acerca del órgano sexual del hombre, así que cualquier cosa que le parezca atractiva de éste, es importante decirlo en el momento. Se deben acariciar no solo la zona genital (que incluye la región del periné que va de la región del ano hasta los testículos) sino también la nuca, el pecho, los glúteos, el vientre y los muslos. También es necesario que de vez en vez, la mujer tome la iniciativa y le diga o insinúe al hombre que lo desea, porque esto igualmente le estimula. De la misma manera que en el caso de las mujeres, estas recomendaciones varían en su resultado entre un hombre y otro.

Hay que probar y ver a qué estímulos reacciona mejor nuestra pareja y recordar que los besos, las caricias, las miradas, la gentileza, el humorismo y el buen trato no deben darse sólo previos a la relación sexual sino que deben ser un buen hábito para que el deseo sexual se mantenga presente.

Me permito hacer un apartado especial para tocar brevemente el tema del orgasmo masculino y femenino debido que entre más sea satisfactoria una relación sexual, habrá mayores posibilidades de que el deseo sexual o libido continúe.

El orgasmo femenino es un hecho peculiar porque se da de diferente manera en cada mujer. Sin embargo se acepta que durante el período de mayor excitación y sensación de placer, hay contracciones en la vulva, en la vagina y en el útero (que el hombre puede sentir), al igual que una lubricación o humedad más abundante al lograrlo. Además la mujer puede lograr uno o varios orgasmos durante la misma relación sexual, dependiendo de la estimulación.

El orgasmo masculino es la sensación de placer en la que el hombre llega al clímax de excitación sexual producida por el estímulo sexual que normalmente finaliza con la eyaculación o salida del semen.

Es muy recomendable preguntarle a nuestra pareja cuáles son sus fantasías sexuales y que sin vergüenza o miedo de ninguno de los dos, se diga qué es lo que les gustaría hacer y realizar un esfuerzo por llevarlas a cabo.

Sólo me resta insistir en que ante cualquier duda con respecto a la falta de deseo sexual o ante la imposibilidad para tener relaciones sexuales, es imprescindible acudir con su Médico al igual que al Psicólogo o Psicoterapeuta para que se le apoye a Ud. o a su pareja en la solución de éste problema.

Las Flores de Bach es una terapia alternativa natural que ha demostrado ser un auxiliar eficaz en el tratamiento de la inseguridad, la indecisión y el estrés asociado a la falta de deseo sexual.

Basada en el hecho de que científicos, físicos cuánticos, aseguran que atraemos a nosotros lo que pensamos con mayor frecuencia e intensidad; invito al auditorio a pensar frecuentemente en una relación de pareja armoniosa, placentera y feliz y a enfocarnos en ello el mayor tiempo que nos sea posible para que esto se convierta en una realidad palpable.

Me despido con una frase del poeta, escritor, diplomático mexicano y premio Nobel de la Literatura en 1990, Octavio Paz que mencionó:

En todo encuentro erótico hay un personaje invisible y siempre activo, la imaginación.

Dra. Abigail Bello Gallardo

Marzo 2010